La Fundación Casa de México en España presenta la exposición, LA MITAD DEL MUNDO. LA MUJER EN EL MÉXICO INDÍGENA. EL ÁMBITO DIVINO, que reúne 98 piezas de escultura y cerámica, además de textiles, cestería, y óleos, provenientes de culturas antiguas como la mexica, maya, olmeca, huasteca, teotihuacana, entre otras, con motivo del año de la mujer indígena. Una primera muestra de tres dedicadas al principio femenino que se realizarán en la capital española. También, parten del conocimiento de las numerosas culturas precolombinas que existieron desde hace treinta siglos. Hoy México es un país de una enorme diversidad cultural, pues, además de la población mestiza, en su territorio conviven afrodescendientes, y 74 pueblos originarios herederos de tradiciones milenarias, que hablan, 68 lenguas propias. Así, las mujeres indígenas juegan un papel fundamental para su continuidad y resistencia ante los cambios del presente.
La exposición presenta tres líneas temáticas: Las dos partes del mundo; La ostentación del cuerpo; y La sacralidad femenina. El México prehispánico concebía el mundo y el Universo a partir de principios duales e interrelacionados, entre los que sobresale, lo masculino y lo femenino. Así, lo femenino, se relacionaba con la fertilidad, el origen de la vida como su final, la muerte; igualmente, con la naturaleza, la madre Tierra, imprescindible para subsistir; también, con los ciclos lunares, que marcan los procesos temporales. El sol, en cambio, se representa como hombre. Por otra parte, las esculturas y cerámicas del cuerpo femenino resaltan su anatomía, en cuanto atributos simbólicos de la fecundidad, la nutrición y la regeneración, destacando su cualidad como espacio de origen, transformación, muerte y continuidad cíclica, así como metáfora de la Tierra como madre y matriz.
La exposición no se centra solo en los pueblos antiguos, sino también, en piezas del siglo XXI, que muestran la pervivencia de las concepciones indígenas tradicionales. Finalmente, la última línea temática de la misma, se refiere a las deidades femeninas, a la vez creadoras y destructoras, ligadas a la sexualidad y la purificación, los partos y la muerte. Son poderosas y ambivalentes, capaces de cambiar de género o tener atributos mixtos, según el contexto ritual o simbólico. Después de la influencia de la religión cristiana de los colonizadores, fueron reasignadas en advocaciones de la Virgen, con poder sobre la vida y la muerte.




No hay comentarios:
Publicar un comentario